Continúa el proyecto de Mejora del sistema de atención integral a la violencia machista en Sololá, Guatemala

En este año 2022, AMLUDI ha aumentado su intervención en los municipios San Lucas Tolimán y Santiago Atitlán reforzando su servicio integral a mujeres indígenas víctimas de violencia machista y sus hijas e hijos menores, con atención diferenciada para las adolescentes y una atención cultural pertinente para mujeres indígenas.

Año tras año, el proyecto acoge cada vez más participantes destacando sobre todo alta demanda de hijas e hijos menores de las víctimas, atendiendo a 107 frente a los 49 que se atendieron el año pasado, considerándose un éxito el alcance que está teniendo el proyecto. Además, también se valora de manera positiva que el proyecto esté llegando a otros municipios ya que se reciben casos de otros municipios, como Aldea Cerro de Oro y Patutul, que incluso pertenece a otro departamento diferente de Sololá.

                                                           

Dentro de este crecimiento que están teniendo a lo largo de los años, tiene mucha importancia el matiz cultural por el que luchan desde AMLUDI, las cuales defienden las diferentes identidades que rodean los municipios en los que trabajan y buscan la atención especializada contribuyendo a recuperar las prácticas ancestrales y afianzar procesos de mujeres sobrevivientes de violencia con las profesionales del centro de atención hacia las entidades de justicia, que facilita y agiliza procesos como mujeres indígenas sujetas de derechos. Este año han seguido aumentando sus encuentros y acompañamientos a otras organizaciones de atención a víctimas de violencia machista con esta perspectiva, y, en concreto, se han conseguido crear espacios comunes con otras 10 organizaciones de mujeres de Sololá para realizar talleres de aplicación del enfoque cultural y se entregaron ejemplares del modelo de atención con pertinencia cultural para la atención a mujeres indígenas en cumplimiento de sus derechos, para que cada vez desde más recursos apliquen este enfoque. Sin embargo, las organizaciones de turno han manifestado que el Organismo Judicial cuenta con un sistema de atención y se rigen a través de ello, y se ha identificado también el poco interés de los sistemas de justicia por aplicar y atender las necesidades de las mujeres indígenas desde sus culturas y sus prácticas ancestrales.

También es bonito señalar que, como parte de este proceso de interiorización de las organizaciones e instituciones públicas respecto a la cultura, también se han realizado jornadas de reflexión sobre los retos de aplicación, talleres de formación y sensibilización, visitas de verificación e información sobre el funcionamiento de las instituciones públicas para la prevención y atención a la violencia de género en Sololá, etc. Esto ayuda a que las actividades pensadas por AMLUDI no caigan en saco vacío, vayan calando poco a poco en las instituciones públicas y se vaya dando una transformación real en la zona.